Prevención y extinción de incendios
La clave para que el nivel de Prevención contra incendios de una Empresa sea aceptable, reside en la importancia que el elemento humano le conceda al mismo. Por mucha que sea la atención económica y de medios que se preste, sin el factor humano, desde el último trabajador al cargo directivo más importante, éste no resultará efectivo.
Toda la plantilla de una empresa debe estar involucrada en la prevención contra incendios de sus instalaciones.
Los medios humanos que componen los servicios de prevención contra incendios deben ser formados de forma periódica, tanto de manera práctica como teórica
Esta organización de los medios humanos, debe complementarse con una serie de programas y planes que aseguren la dotación apropiada de medidas de seguridad, su mantenimiento, la formación del personal y su actuación en caso de incendio.
La formación de los miembros del Equipo debe efectuarse periódicamente, distinguiéndose dos vertientes:
La eficacia de la organización y de los entrenamientos del Equipo de Incendio, debe ser controlada mediante alarmas inesperadas.
Estos ejercicios deben efectuarse una o dos veces por año, para perfeccionar las puestas a punto, así como para comprobar el comportamiento del personal que no está directamente relacionado con las Brigadas.
Cada organización dependiendo de su tamaño, peligrosidad asociada de la rama de negocios a la que pertenece, y número de trabajadores, deberá organizar su Equipo de Prevención de Incendios de acuerdo a sus realidades propias.
Ahora bien, todo Equipo o Brigada, deberá contar al menos con:
Este cargo debe recaer en una persona que posea cierta autoridad o se le confiera con el nombramiento y tenga unos conocimientos apropiados al puesto que va a desempeñar. Veamos este breve vídeo.
En resumen el trabajo del J.E. consiste en ocuparse de todos los aspectos relativos a la seguridad de incendios de la empresa, debiendo responsabilizarse de:
El Equipo de Intervención es el conjunto de personas especialmente preparadas para la extinción de incendios, que desempeñan un puesto de trabajo y que en caso de emergencia se incorporan a la misma.
Sus miembros deberán poseer formación teórica y práctica suficiente para realizar las tareas necesarias en la extinción de incendios.